- Cas Gasi -
PATRIMONIO DE IBIZA: SES SALINES

En algún momento del siglo VIII A.C. los fenicios se asentaron en Ibiza y empezaron a construir las salineras de Ses Salines al sur de la isla. Después de los fenicios llegaron los cartagineses, los romanos, los vándalos, los bizantinos y numerosas hordas de piratas, saqueadores y oportunistas. La producción de sal fluctuó con la constante oleada de invasores hasta que llegaron los moros y lo pusieron todo en orden en el año 902 D.C. Aunque no por mucho tiempo, los reconquistadores llegaron a la isla y tomaron posesión, modernizando la producción de sal y convirtiéndola en una de las principales fuentes de beneficios de Ibiza.

Las condiciones laborales eran brutales en las salineras. Los hombres de toda la isla venían a hacer la cosecha, que tenía lugar bajo el ardiente sol de julio y agosto. Se llenaban enormes cestas de sal hasta rebosar que luego los trabajadores cargaban a la cabeza mientras caminaban apresuradamente varias millas hasta llegar a la dársena desde donde se cargaba la sal a los barcos. Los barcos procedían desde todos los puntos de Europa y la sal era considerada una comodidad importante y a menudo se empleaba como moneda de cambio.

En la Edad Media los barcos que venían a recoger la sal también servían otros propósitos. Sin acceso a medicación, muchos ibicencos enfermos se trasladaban hasta la dársena para negociar un acuerdo en esperanza de curar sus enfermedades con cualquier medicina que los barcos pudieran portar a bordo. Sólo podemos imaginarnos las consecuencias.

A lo largo de los años, la producción de sal presentó altibajos. Sin embargo, recientemente ha gozado de un resurgimiento con la preciosa marca Sal de Ibiza que ha conseguido revivir esta industria. Los productos crean un magnífico suvenir mientras que la calidad de la sal podría rivalizar con cualquiera de las otras marcas más conocidas.

Ses Salines fueron declaradas por la UNESCO como parte del Patrimonio de la Humanidad en 1999 y oficialmente se convirtieron en Reserva Natural en 2001. Este hermoso paraje es el hogar de numerosas aves incluyendo flamencos, varios tipos de halcones, aves zancudas, aves acuáticas, garzas, garcetas y águilas pescadoras. Además varias aves de rapiña visitan frecuentemente las salineras, incluyendo el aguilucho lagunero, el halcón peregrino y el cernícalo que anidan en esta zona.

Es un lugar precioso para explorar y que además cuenta con profundas raíces históricas y de gran belleza paisajística, un lugar por el que los propietarios de Cas Gasí, Margaret y Luís, adoran pasear y explorar.